Como el aleteo de alas al batir,
amanece...
Un torrente púrpura se derrama en mis pechos,
son pétalos que gritan su muerte...
Me ahogué entre sus brazos,
en lo hondo. Y volví a nacer...
He dormido demasiado tiempo,
entre cañaverales con olor a incienso...
Renaciste.
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