Cuando florecen los flamboyanos la plaza parece un lienzo de tornasolados tonos. Viene sonriente, con presteza, con sus ojos menudos y el vaquero de siempre, el de todas las estaciones. Y llegan sus brazos para socorrer los míos, que llevan una torre de papel fotocopiado. La alfombra de adoquines cubre la plaza; hay dos hileras de ellos desdentados, con dolor de huesos; el sol hace rato que acaricia los lomos de los tejados y las ramas de los árboles que parecen sonreír. Transcurre la mañana entre el fragor de los golpes de las teclas, de los timbres de teléfonos; de nuestras voces, de un ir y venir agitado. A lomos de mi caballo blanco te llevaré por los prados. Yo le devuelvo una sonrisa afirmando. El texto justificado, Times New Roman y tamaño de fuente doce. Píe de firma y fecha. Los informes impresos esperan en la mesa; les doy la última puntada, los doblo asimétricos y los introduzco en los sobres. Quedan en pequeños montoncitos, igual que la ropa doblada y recién planchada. Parece que llueve, son las primeras gotas del otoño. Él vuelve siempre, lo hace desde que una madrugada marchó no sin antes despedirse sonriente, con un beso y con el vaquero de todas las estaciones.
Bonito micro-relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Rafael...
ResponderEliminarAbrazos
Me ensalma el acento moroso del texto, con una tristeza que no es dolorosa, sino nostálgica. Viene con el color del otoño, en una prosa poética, que transversa tiempo y vaquero, para darle mayor sepia, a la coloratura del texto. Grato estar aquí. UN abrazo
ResponderEliminarPues muchísimas gracias Carlos,
EliminarUn abrazo
Yo voy a lomos de Arial 11.
ResponderEliminarArial 11? quien es?
EliminarArial es otro tipo de letra y el tamaño 11. Toro siempre tan original :)
EliminarMenos mal que ya le conoces...
EliminarUn beso enorme pa ti.
Aniagua, me pasó lo mismo que a ti, y luego pensé, lo que a lo pillas ¡¡¡
Eliminarvamos lentas¡¡
Un beso para ti.
otro para lo pillas, y otro para las letras.
Si, en verdad no lo pillé ..
EliminarUn beso , Amapola!
Qué bonita es la plaza con los flamboyanes en flor!
ResponderEliminarDescribes la rutina de una forma salerosa.
Besito
Gracias preciosa amiga.
EliminarSabes quien es él?
besitos!
Me quedé dándole vueltas, pero no caigo. Ya me dirás :)
EliminarEl florecer cíclico y el llegar con el vaquero de siempre son todo uno en tu interesante y ambiguo relato.
ResponderEliminarUn saludo
JM
Muchas gracias, Juan
EliminarSaludos.
Tremendamente visual y cargadito de buenas metáforas. Me gustó mucho.
EliminarAbrazos soleados.
Gracias, Lola , muy amable
EliminarAbrazos soleados paraa ti también
Me ha gustado esa alfombra de adoquines desdentados.
ResponderEliminarUn abrazo, Aniagua.
Gracias Fernando y gracias por tu visita
EliminarAbrazos
Preciosa prosa poética que parece embalsamar la nostalgia de los recuerdos.
ResponderEliminarAbrazos.
Muchas gracias , Marisa
EliminarAbrazos.
Siempre un placer visitar tus páginas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Rafa.
EliminarAbrazos.
Muy bello micro relato y un gran blog. Un cálido abrazo y felicitaciones de la Sociedad Argentina de Escritores Filial Villa María- Córdoba.
ResponderEliminarMuy honrada por su presencia y gracias por seguirme.
EliminarUn cálido abrazo.
el amor es una estación a la que muchos esperamos llegar, y la que a veces nos sorprende con su llegada imprevista, hermoso escrito saludos amiga
ResponderEliminarGracias por tu visita amiga...
EliminarUn gran abrazo
Muy hermoso, Un abrazo. Feliz semana.
ResponderEliminarGracias ,
EliminarAbrazos y feliz semana también
Bueno, pues me resulta poética tu entrada, se ve que él es la poesía, y sino debería de serlo¡¡
ResponderEliminarTe deseo que sigas escribiendo así de bien¡
Gracias por tus bellas palabras Amapola..
EliminarÉl hace tiempo que se fue, pero está siempre en mi corazón