miércoles, 5 de marzo de 2014

Un balcón con Petunias

Creo que el mundo interior se construye a partir de lo cotidiano, es decir, de las múltiples imágenes, sucesos,  o,  de un paseo por algún sitio interesante,  también se podría  seguir otra circunvalación , aunque ésta nos lleve al mismo sitio de donde partimos. Por lo tanto todo se desliza igual que  un tobogán hacia ese interior. Un mundo lleno de enlaces, de paradas de bus; kilómetros de autopistas, donde nosotros podríamos ser los autoestopistas, con la mochila a la espalda, y algunas monedas sueltas. Es un entramado de líneas con vida propia. Podrán haber puntos de vista; discrepancias; guerras infortunadas. Podrá escasear el trigo o la carne, o simplemente ya no habrá; pero somos nosotros los que una vez hallamos introducido por ese tobogán otro mundo, los que decidamos qué camino escoger; qué hacer con el trigo, o ser felices igualmente toda vez que podamos sentir que no somos huecos, que la piel y los huesos son un vestido más o menos elegante, y deduzcamos que la felicidad se halla esperando en cualquier parada de esa gran autopista en la parte de adentro.

19 comentarios:

  1. Como biern dices es ese balcón con petunias el que conforma los diferentes caminos del mundo en que vivimos.
    Un abrazo.

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  2. Ser feliz de forma perpetua es imposible.
    No es una queja. Es un hecho.

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  3. Me encanta... es un escrito muy profundo... Y llena de paz.

    Creo que llevas la razón. Quizá por eso deberíamos cuidar el entorno, para que lo que llegue a nuestro interior lleve belleza...

    Muchos besos.

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  4. A mí también me gusta pensar eso. Creo que es aplicable a la mayoría de nosotros o a todos en algún momento de nuestra vida.

    Besos

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    1. Gracias jaal por tu visita y comentario.
      Besos igualmente para ti.

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  5. Es cierto que el mundo interior, ese mundo que todos llevamos dentro, se construye con las pequeñas cosas que nos rodean y que son habituales en el día a día.
    Un abrazo y feliz jueves querida amiga.

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  6. De acuerdo contigo, María.El mundo interior se construye en lo cotidiano, por eso hay que poner flores en nuestras ventanas y abrirlas de par en par para que el aire se renueve en la casa que habitamos y llegue a las habitaciones interiores.Y no olvidemos que las petunias necesitan riego abundante.
    Muy poética reflexión.

    Un ramo de petunias para ti, y un abrazo.

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  7. Gracias por ese ramo te petunias, Fanny, me encantan.
    Otro abrazo enorme para ti.

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  8. Hola, María.

    Creo que fallamos (unos más que otros) en potenciar nuestro mundo interior. Me ha parecido realmente precioso.

    Un beso muy grande.

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  9. Muchas gracias Towanda, eres un encanto...
    Otro beso grande

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  10. La vida cotidiana con sus detalles de los cuales pueden nacer mil historias.

    Saludos

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  11. Que es sentir la vida que fluye, con esas cosas simples que nos tocan. Hace rato miraba en el "carelibro", la foto de una amiga, en un lugar entrañable de mi njuñez: una gruta. Y al verla e nueva, la sentí como si nun ca hubiera dejado de ir ahì, a ese lugar entrañable, donde alguna vez de juventud, nos dimos un beso con una amiga o una prima. Un abrazo. Carlos

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    1. Qué bien verte Carlos, gracias por tu bello comentario..
      Un abrazo.

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  12. Un balcón con petunias 'surfinias', cuya planta con ya violadas flores, da un agradable aroma al anochecer.

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