Aplausos


Nada más alentador que un aplauso. Pero cuando se repiten por compromiso la vanidad de aquell@s que los reciben se convierte en un monstruo devastador.


María Gladys Estévez.

domingo, 16 de febrero de 2014

Cenefa de flores

Ella habla conmigo, sin embargo no entendemos bien la coversación de ambas.

 Repite dos o tres veces , que el arroz con pollo y pimientos quedará sabroso, que cuando llegara la hora de la comida, todos acudirían y ella se sentiría orgullosa por ello. Pero yo, sabía perfectamente que a ella lo que le hubiera gustado es que le dijeran que estaba bonita con su nuevo color de pelo, o que la sopa de letras había quedado perfectamente realizada. Aquí ha quedado una mota de polvo- dice. Y yo asiento y vuelvo a pasar la mopa, disciplinada, igual que cuando era una niña. Sus negros ojos brillan cuando la luz entra por el ventanal de la cocina y yo sonrío porque la veo igual que cuando necesitaba de sus besos, de sus arrumacos:Desparece la sopa de letras en la mesa; desaparece la cocina eléctrica; desparece el gran ventanal de la cocina, mejor ahora, me digo, y no dejo de mirarla, es como si sostuviera en mis manos un libro, y las páginas en vez de avanzar, retrocedieran, y, estamos juntas, en una pequeña cocina, con una pequeña lumbre, una plancha de hierro pendiente de la fogata para las camisas blancas de papá; y ella, con una sonrisa, y unos jóvenes ojos negros me consuela: Sana, sana,sanita...y yo, beso su cuello moreno, y duermo, confiada, en su pecho...,


16 comentarios:

  1. Cada vez que te leo me transportas al mundo de los sentimientos.

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  2. Un placer leerte María, tan dulce y delicada, y tan profunda a la vez...

    Un abrazo.

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  3. Parece como si está cenefa estuviera descosida de otra que nos has dejado recientemente...
    Un abrazo en la noche.

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  4. La nostalgia es uno de los temas líricos que fatigas con acierto. SE intuye una mujer moreno-diríase de color-que no sólo fueron estupendas cocineras, sino también ayas, y se engarzaron en nuestro corazón, por el afecto que nos brindaban. Garto leerte. Carlos

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  5. Te envidio esa facilidad que tienen en recrear tan fotográficamente esas vivencias de pasado. Cada vez que te leo me llevas al recuerdo de mi madre y mis propias vivencias.

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  6. te comento los dos relatos desde aquí,tus recuerdos,tu nostalgia,tus letras están llenas de tantas cosas,están tan vivas,que es imposible quedar indiferentes,es como cuando paseas por la ciudad y no ves los escaparates ,ni la gente que te rodea si no que vas imaginando como fueron las vidas que pasearon por esas mismas calles,como fueron los juegos de los niños que las pisaron,de pronto las aceras se llenan de sombras del pasado,de pronto tus letras se llenan de vida.
    abracitos

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    1. Te he leído y me entiendes...
      Abracitos, Ramón y muchas gracias

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  7. Bellísimos recuerdos de una madre que siempre recordaremos por su amor y esa seguridad que nos brindó.
    Precioso relato, amiga.
    Muchos abrazos.

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    1. Qué bien que te haya gustado, amiga ...
      Te envío muchos abrazos de vuelta.

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