Aplausos


Nada más alentador que un aplauso. Pero cuando se repiten por compromiso la vanidad de aquell@s que los reciben se convierte en un monstruo devastador.


María Gladys Estévez.

miércoles, 7 de mayo de 2014

De luces y algunas sombras




Nada es lo único que se puede oír a éstas horas de la madrugada. Nada es el ulular del viento, que, altivo y atrevido ha soplado insuflando pulmones y, montañas y sus picos han sido sobrevolados; pinos y cipreses bamboleados,azotados... Nada es el vagar de aquí y allá, paso a paso pies descalzos... Nada, nada y nada es el silencio tan sobrecogedor; compunge, compunge...a un alma ya fenecida. Adagio, adagio... 
Nada es ese soplar agónico de bocas que se despiden... Nada es esa lengua de aire que se cuela por entre la túnica verde, que viste el cristal de la ventana...Nada es ese cristal de rubí que llevan los niños en su pecho... lloran, lloran su venida al mundo, lloran, lloran su venida, con ese cristal rubí, de los angelitos, de ellos, de los niños... Ora nada, ora todo. Silencio, silencio: Su pecho calmo, sus ojos cerrados...duerme, duerme, bello ópalo, duerme...,

6 comentarios:

  1. Me encanta oír la nada.
    Ese zumbido vacío que regala la madrugada.

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Tus letras son como esa nana que muchas veces queremos escuchar en el silencio de la noche.
    Un abrazo y gracias por este regalo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eres muy generoso Rafael...
      Me alegro que te haya gustado

      Abrazos y gracias a ti , por la visita.

      Eliminar
  3. Nada trae la noche
    entre el silencio y la bruma,
    una nada enorme
    llena de vacíos,
    vacía de intenciones,
    y toda mi ilusión,
    lo que me nace,
    lo que siento,
    inerte y triste yace,
    como una copa de vino
    que no bebe nadie.

    Gracias María por tus letras tan bellas y por estar siempre al lado de las mías,como ves yo también ando sumergido en la nada,pero será momentáneo,siempre me pasa cuando estoy a punto de pasar revisión médica y ademas están estos ruidos en la cabeza que se empeñan en acompañarme (acúfenos,secuelas de la quimio) bueno,no puedo quejarme demasiado,al fin y al cabo soy un afortunado,tengo a mi lado a Angela y mucha gente que me demuestra su cariño.
    abracitos,amiga.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mi querido amigo,

      Qué bello poema has dejado. Gracias y mil gracias por hacerme feliz con tu huella.

      Espero que sigas bien, que seas feliz junto a Angela.
      Verás que todo está bien.

      Te aprecio mucho, Ramón

      Abrazos siempre.

      Eliminar

Ballade pour Sophie

Ballade pour Sophie

Se habían despedido el mismo día en que se encontraron, solo que, ninguno de ellos lo sabría hasta pasado unos años, en que, l...