Ese descaro que es el que define quizás lo que realmente soy,no es ni mas ni menos que la tremenda osadía de mi persona ante los males y los absurdos que se puedan anteponer cada día en cualquier lugar donde suelo acudir, o cuando estoy en compañía de seres potencialmente cínicos e hipócritas...,
Esa osadía es muy saludable. Demasiadas veces uno se calla o sigue la corriente.
ResponderEliminarUna breve reflexión que nos interroga.
Un abrazo, María. Me gusta leerte.
Qué linda eres , Fanny
EliminarAbrazos.
Valiente descaro.
ResponderEliminarUn abrazo.
A veces lo que nos rodea nos impulsa a ser de una forma. Lo importante es siempre mantenerse auténtico, María.
ResponderEliminarBesos.
Cierto Ricardo.
EliminarBesos.
Yo no acudo ya.
ResponderEliminarQue les den.
Besos de vuelta para ti ...
EliminarAsí hay que ser a veces. Un beso.
ResponderEliminarOtro beso de vuelta para ti.
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