Aplausos


Nada más alentador que un aplauso. Pero cuando se repiten por compromiso la vanidad de aquell@s que los reciben se convierte en un monstruo devastador.


María Gladys Estévez.

lunes, 4 de noviembre de 2013

Algunos días

Debieron irse todas las lágrimas, pero se quedaron ancladas alrededor de la casa; la niña llora, la mujer llora. Hace tiempo que los manteles no cubren aquella mesa, hace tiempo que el abeto perdió las lamparillas, y las noches son igual que las carreteras interminables que dan paso a otra carretera o a otro cruce; parece como si hubieran borrado la línea del horizonte donde debieran salir todos los días los dedos del sol.

29 comentarios:

  1. "...Algunos días valía más que no amaneciera..."
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Una manera muy hermosa de describer un acontecimiento triste. Poético

    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Lo único seguro en la vida es el cambio. El horizonte tarde o temprano volverá.

    ResponderEliminar
  4. Bello texto cargado de melancolía. Te felicito.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Qué bonito ese sol asomando los dedos.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  6. Esos "algunos días", para millones de personas son "todos los días".Sin esperanza,sin salidas ni puestas de sol.Lo describes de forma poética y así podemos digerirlo mejor,aunque no conseguimos que el corazón se conforme.Duele, duelen tus palabras; es preciso que duelan.

    Me gusta mucho cómo escribes.Brevedad y reflexión sobre lo cotidiano.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  7. Ese "Algunos días", para millones de personas es "todos los días"; sin esperanza, sin salida, sin salidas ni puestas de sol, sin nada...Tus palabras duelen aunque escribes de forma poética; es necesario que duelan para sentir la herida de los otros.

    Me gusta cómo escribes: brevedad y profunda reflexión de lo cotidiano.

    Saludos.
    Fanny

    ResponderEliminar
  8. ESPECTACULAR,sobre todo las dos frases finales
    abracitos María y gracias por estas gotas de sensibilidad.

    ResponderEliminar
  9. Muchas gracias, Ramón...
    Abracitos para ti también

    ResponderEliminar
  10. Palabras y sentimientos van muy bien mezclados en tus letras Aniagua!!!!

    ResponderEliminar
  11. Aquí en tu blog , sale todos los días el sol, un beso para ti, y un abrazo.
    Feliz semana¡

    ResponderEliminar
  12. Tramsmite esa inevitabilidad de las cosas que inquietan. Me ha encantado.
    Saludos coleguita

    ResponderEliminar
  13. Escribes con tal sentimiento, que me has contagiado de melancolía hasta el punto que me cuesta ver por el horizonte asomar los dedos del sol.
    Espero que tu próxima entrada sea un poco más alegre, más esperanzadora.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias María José...
      Seguramente la próxima entrada tiene un sol
      Un abrazo

      Eliminar
  14. De cómo nace la tristeza de un día...

    Saludos, Aniagua.

    ResponderEliminar
  15. De cómo nace la tristeza de un día...

    Saludos, Aniagua.

    ResponderEliminar

Ballade pour Sophie

Ballade pour Sophie

Se habían despedido el mismo día en que se encontraron, solo que, ninguno de ellos lo sabría hasta pasado unos años, en que, l...