Aplausos


Nada más alentador que un aplauso. Pero cuando se repiten por compromiso la vanidad de aquell@s que los reciben se convierte en un monstruo devastador.


María Gladys Estévez.

miércoles, 30 de septiembre de 2020

Pensar

 

Y como un ave que despliega sus alas he visto un amanecer allá en el cielo acariciando ventanales, casas.

Alfombrando con pétalos de rosas los caminos. Un abrazo cálido gratuitamente dado (esplendor de la naturaleza).

Aquel pinzón azul sorbe gotas de agua en el pico de una hoja. Los pasos aquí y allá de las gentes ocupadas en sus quehaceres; un tranvía recorre el trayecto espiando tiendas, cafés. Las personas que van dentro miran el reloj, otras leen un libro. Seguramente hay alguien que quiere volver a vivir aquellos días que se fueron, pero que viven en su memoria. 


Así pienso cuando ese sol tímido besa mi rostro. 

Dan ganas de envolverlo todo con un precioso papel de regalo.

10 comentarios:

Ballade pour Sophie

Ballade pour Sophie

Se habían despedido el mismo día en que se encontraron, solo que, ninguno de ellos lo sabría hasta pasado unos años, en que, l...