Duele, duele tanto que llora. Muerde hendiendo su garra.
Llora lastimosamente, como si un lobo hambriento destripara...
Como cuando se está en la nieve, en la noche de la nieve. Frío. Perverso dolor.
Como cuando se está en el desierto y los cuervos se arremolinan.. escudriñando, anclando sus picos a la piel que queda...
Como cuando se nace o se muere: duele.
Un día, una noche, otro día, otra noche.
Cuando hay que llevar el horrible suplicio de poder sentir. Dolor. Angustia.
La carne roja, y el picoteo constante y carroñero... No hay sangre, es dolor.
Se contagia ese dolor.
ResponderEliminarQue solo sea literatura.
Besos.