lunes, 15 de junio de 2015
Procuraría que las sábanas estuvieran lo bastante blancas, suficientemente limpias, para eso habría de sacrificar horas en vano, si, realmente fueron horas que se perdieron por el desagüe, y el agua, repleta de oraciones, pero el agua también llevaba un grito que a ella se le habría escapado, porque habían días en que las manos jóvenes se llenaron de dolor y, junto con todo eso: El pensamiento, el fluir de la consciencia,pura rebeldía...,
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A veces insistimos ante lo inevitable.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias siempre, Rafael
ResponderEliminarAbrazos.
Y ahora que, ahora que estoy, que estoy tan solo,
ResponderEliminary me paro a buscarte, ¿dónde estás?
Que yo sé que hay otra manera.
El destino no me dejó llegar,
y he buscado la vida entera,
he encontrado la forma de escapar,
de salir del camino a caminar.
Esto lo adoptó de Robe, por lo que siento.
Un placer leerte. Besos siempre.
Qué hermoso sentimiento. Gracias por dejarlo aquí.
EliminarBesos siempre.
El desagüe de las horas....
ResponderEliminarBesos.
En cierto modo, si.
EliminarBesos.
No, nada se perdió por el desagüe..se escapó el grito tal vez desgarrado
ResponderEliminarProfundizando en lo que has escrito , como te han forjado esos acontecimientos, puras rebeldía entonces; ahora eres hierro forjado. eres más lo que eres ¡Eres más mujer!
Besos
André
Gracias por tu extenso y agradable comentario, Andres.
ResponderEliminarBesos
Una pena que dejemos escapar con tanta frecuencia nuestra propia libertad por el desagüe.
ResponderEliminarComo siempre, dejas la puerta abierta para la particular interpretación de tus textos llenos de poesía y cierta ambigüedad que se presta a ese juego de interpretación al que hago referencia.
Besos
Ese modo de ver tuyo, en mis letras, es acertado, María José.
ResponderEliminarBesos.
Hola! Me gustan los escritos con metáforas :) Muy buen trabajo! :) Un beso!
ResponderEliminarGracias Sara, mucha gracias
ResponderEliminarBesos.. :)