Aplausos


Nada más alentador que un aplauso. Pero cuando se repiten por compromiso la vanidad de aquell@s que los reciben se convierte en un monstruo devastador.


María Gladys Estévez.

miércoles, 30 de marzo de 2022

El modo en que puedo permitirme una total ausencia.

 



Ese estado de ingravidez que, al contemplar lo cotidiano, es lo que siento, es como estar dormida o ausente. Al esperar en el ceda el paso de una calle cualquiera me otorgo a mí misma eso. En realidad es algo que siempre he padecido.

Mientras, esos segundos en que una se queda mayestática a la espera de que algún vehículo deje que cruce la calle se hacen toda una eternidad. Es como contemplar una película sin sonidos, es una brisa suave, dulce como un beso que siento confortablemente. De modo que en esos momentos de mudez ante mí surge un gran carrusel: aquel edificio está en obras, hay personas que entran y salen, algunos en la última planta, otros en la acera dirigiendo todo. La tienda de sombreros de la esquina tiene un escaparate precioso: toda clase de abalorios. Los sombreros son como joyas, algunos llevan incrustados pequeños cristales de colores.


La cafetería a estas horas está repleta de gente, toman café, o desayunan. Aquel señor está fuera en un mesa escribe algo en su cuaderno, parece porteño. Es alto, moreno, de unos sesenta años, además bastante atractivo. A veces las personas llevan cuadernos consigo porque siempre hay cosas que anotar: frases, palabras sueltas, o un diario.

Mientras tanto sigo ahí, etérea. Hace mucho que espero, aunque sólo hayan pasado unos segundos.

Hay flamboyanes, son preciosos, copados de flores. Aquella señora sufre, sufre porque tiene el rostro compungido, solloza. Cree que nadie la ve, pero yo si. Ese estado de levedad me permite ver todo con calma. Colores, olores, situaciones. Probablemente le hayan dicho que tiene que pagar la hipoteca porque de lo contrario la desahuciarán, o tal vez, es porque el amor de su vida es una quimera, aunque a ella le haya parecido lo contrario.

Quizás es ella la que tiene el problema: esquizofrenia, o es alcohólica. En algún momento en la prensa saldrá la noticia de su suicidio. Una vida vacía. Una lucha inútil.


Siquiera un avión del ejercito con un sonido estrepitoso volando casi al ras conmueve mi cuerpo.

Sigo ahí en otro mundo. Es placentero. Como una criatura en el vientre materno.

Alguien me besa, pero realmente no ha sucedido, yo puedo percibirlo, pero no hay nadie en esos momentos.

El caballero porteño abandona la cafetería y lo puedo ver enfrente espera para cruzar la calle.

Alguien dice que puedo pasar y es en ese momento cuando vuelvo a la realidad.

Nos cruzamos y nos miramos a los ojos, dejamos que se unan las manos con una leve caricia.






Mi Reina.

   Texto publicado en el año 2014, he querido dejarlo hoy aquí otra  vez"





Nos conocimos un día a primera hora de la mañana en la estación de tren que lleva a Baluba. Yo no estaba de muy buen humor, pero ella me sonreía y eso suavizó mi carácter. Cogimos el mismo tren y casualmente el mismo destino, o eso pensé, porque ella hizo lo posible para coincidir. Más tarde me di cuenta de ello. Sabía que se sentaría a mi lado, yo, lo deseaba.

Me pidió un pitillo y volvió a sonreír, le dije que no fumaba, pero ella no dejaba de sonreír y uno de sus dedos se introdujo por entre mi pelo: Un pelusa, dijo. Tenía el dedo humectado y dejó su rastro en mi frente. El recorrido a Baluba había comenzado, y el de nosotros también. Empezamos a mirarnos y a recorrer cada centímetro de nuestros rostros: Los labios, los ojos, la barbilla… , Había soplado delicadamente mi flequillo rizado y sin darnos cuenta, yo, había introducido mi mano por debajo de su falda y tanteaba y llegué a su sexo libre y uno de mis dedos se deslizaba por él llegando fácilmente al clítoris erguido, duro. Ella hacía lo mismo, su mano entró debajo del pantalón y separó el calzoncillo y se apoderó del pene, sí , era suyo, era el pene que había estado buscando, era su juguete. No hace falta decir que me puse como un loco apasionado, sin nada que pudiese frenar ese lujurioso encuentro. Yo sabía que ella no tardaría mucho en tener un orgásmo, al igual que yo. De modo que su mano agitaba el pene lascivamente. Se mordía los labios y gemía. Yo, debí pensar que ese clítoris era un pastel de moras, porque mi dedo frotaba mas y mas rápido aquel templo de placer, aquel río de melaza.

Tenía las piernas separadas y jadeaba mientras hacía lo posible porque yo explotara y llenara todo de mí. Así permanecimos un buen rato, hasta que ya ninguno de los dos pudimos evitar lo inevitable. !Sí, así , así, mi reina!

El espejo refleja lo que fui.



El espejo

 refleja

 lo que fui

ahora

he vuelto

a verme

cada día

y han pasado

años

luces y sombras

¿Soy yo?








 

martes, 29 de marzo de 2022

¿Me compra algo?, dice la señora.

 

Algunas personas cruzan la calle, otras vienen de frente.

Aquella guagua está repleta de personas, ahora gira a la derecha, desaparece al entrar en aquel túnel.



¿Me compra algo?, dice la señora.



-Una limosna por favor, dice Lucas el señor que fue a la guerra y se dejó allá la memoria y el alma.


Ahora cae al asfalto el señor con bermudas, lleva dos bolsas.

¿Le ha pasado algo?, ¿se hizo daño?, dijeron dos señoras.


Tengo el móvil en las manos y entra un Wass: entonces nos vemos a las dos de la tarde en la tasca el Pecado?-

Si, claro.


Pero qué bonitas esas gaviotas aún en la confusión por sobrevolar el centro comercial. ¿Se habrán olvidado del mar?.


-Lleve un numerito señora la suerte está de su parte, dijo Gregorio-


Hay en aquella esquina un perrito, lanudo. Espera a su dueño, o dueña. (sabe que lo premian con alguna golosina).



Lo asombroso es poder observar, quedarse un rato en el mismo lugar.

Oh!, las bienaventuranzas que nos da la vida.


¿Quieres otra copa?.


Claro, todas las que sean y más.


Qué pillina eres-


No, no es cierto, es que vivo ahí dentro, en lo hondo.



Se me hizo un mar pacífico.


Se me hizo

un mar

pacífico

mientras 

pasaban

los años

Fui

quien

esculpió

todos

esos 

años

atrás

Fui

quien amantó

aquella chiquilla

joven

se ha mirado

al espejo

y sigue siendo

la misma

aunque

mayor

mayor

por dentro

y por fuera

Aún te quiero

a ti, María Gladys




 

lunes, 28 de marzo de 2022

Y resultó que no era un cabritillo.


Y resultó

que no era 

un cabritillo

más bien

algo

que aún no 

tiene nombre


Dijo: ojalá se esfumara

y sea polvo





 

A la Luna se le ha escapado una lágrima.


A la 

Luna

se le ha escapado

una lágrima

eso es trágico

El Sol

besó

esa lágrima

se quieren

mucho




 

Hay gotas de agua sobre la mesa


Hay gotas de agua

sobre la mesa

y eso me recuerda

a las tuyas

cuando vienes y te quedas

un rato

son besos

lágrimas

y tu almizcle 

 

Pasear entre las páginas de un libro de cuentos.

 

Pasear entre las páginas de un libro, un libro de cuentos: caminos aquí y allá.

Entre caramelos de café se había envuelto, como cuando una mano hubiera acariciado.

Ahora una hermosa higuera, ahora un tornado de estorninos. Una nube gandula sonríe.

A la izquierda juegan unos niños, cada uno con su cometa, la brisa es propicia.

Un ejército de hormigas desfila en el borde filoso, quizás algún trozo de pan de la merienda, quizás, entre líneas, e imágenes fosforescentes. ¡Qué revuelo!

Chocolates, duraznos, fresas en aquella otra esquina ¡Qué bonito! .

Aquí es donde se pliega el papel : un castillo azul, un puente, malvaviscos,¡ esponjita!

Arboledas. Un río pequeño que fluye, con sus peces y todo,¡ si hasta parecen de verdad!

Huele a cotufas. Un mastín ríe a carcajadas. Un búho duerme. Aquella carpa habla mientras recorre las aguas, algo sabrá, algo querrá decir.

Hay dos percheros. Son de la ropa de la bruja, es muy ordenada. La escoba, justo allí, en la parte derecha de una página, la siguiente página. ¿Cencerros?, si, lo llevan aquellos corderos, pero el perro guardián les ha desprovisto de ellos, porque los corderos deben ser libres, muy libres.

¿Falta una página? Si pero mañana, ahora sale la luna. Hay una luna grande.

Una guitarra suena. Gary Moore.

Aquí en la charca croan las ranas. Hay un plantón de tuneras alrededor.


¿Pero falta una página verdad?










viernes, 25 de marzo de 2022

El mentol de su boca.


El mentol

de su boca

explota

donde

nadie

sabe

más que 

yo

 

Susúrrame una canción.


Susúrrame

una canción

con sabor a manzana

y a pan con mermelada


 

Tengo un querer de papel


Tengo 

un querer

de papel

de esos de brillo

y cómo fue que no 

te vi 

en 

mi 

tiempo

te hubiera

conocido

en alguna visita

al palacio de

allí 

y no dejaría 

que te fueras

nunca

pero nunca

es nunca



 

El amor en blanco y negro.

 Dijo que no volvería, eso dijo. Pero después de un tiempo  regresó.

Dicen que el amor se ve en blanco y negro. Podrá ser seguramente que si. Los colores y pinceladas vienen luego.

Pero como decía, Lorena, regresó. 

Eso si, después de viajar a Perú. Un viaje glorioso.


"Eres música

de guitarra

tu voz resuena

como relámpago".


El amor que dejó ya tenía color. 

Ya tenía su amor.

Ya tenía.


Se ancló al tiempo olvido. Se calzó el mundo. 

De pespuntes cosió el pasado. 


"Qué es reflexionar.

nadie sabe.

nada se sabe.

¿Y la verdad?".


Te quedé

te quedaste

en lo hondo

lo más hondo.


Luego de una noche agitada se dirigió al mar. 

Allí entre las caricias de las olas, olas amantes.

Por cierto el pan con tomate es riquísimo, se dijo.



Fui cobarde pero mi cobardía se quedó de piedra.


Soy

de 

lo

oscuro

He pasado 

mis días

queriendo

saber

la verdad

fui cobarde

pero mi 

cobardía

se quedó

de piedra

cuando

una mañana

de esas

en que 

trasnoché

y me fui

a sus brazos

en aquella cama

de dioses

se quedó

de piedra

mi cobardía

Digamos

que soy

otra

mujer

ahora

libre

Sigo

siendo

de lo oscuro

a fin de la noche

mí noche



 

jueves, 24 de marzo de 2022

Y tú te ti acercas a mí.


Y tú

te

ti

acercas

a mí

quiero

ese elixir

derramarse

entre mis piernas




 

El humo del cigarrillo se me antoja tus labios alejándose.


El humo

del cigarrillo

se me antoja

tus labios

alejándose 

en el olvido

de

lo 

efímero



.......................................

Cómo puedo

contener

las ganas

si

te tengo

siempre

siempre


..........................

Ayer

entre

sueños

se quedó

uno de ellos

en mi almohada

.....................





 

martes, 22 de marzo de 2022

Esos momentos a solas.

  Sorber un vino rojo y mantenerlo entre los labios y dejar que recorra la lengua, y dejar que bese el cielo de la boca, es igual que una leve caricia entre dos amantes.Un chispeante recorrido entre la lluvia en otoño; es admitir esa sensación de placer, que, aunque efímero, deja un instante explosivo, diría yo: un explosivo s


sueño de amor.

viernes, 18 de marzo de 2022

El muso no está la musa tampoco.



Hoy

no 

qué

decir

El muso

no está

la musa

tampoco

alejados

de mí

hoy estoy

aquí 

justo

en el borde

filoso

de esta vida

este modo

de vivir

que

no entiendo

 

jueves, 17 de marzo de 2022

¿Quién decide?.


Ni 

más

vestido

que mi piel

¿Quién decide?

¿Dónde la verdad?

No hay un tiempo

sólo se que me hallo


 

miércoles, 16 de marzo de 2022

He buscado tu sombra


He buscado

tu sombra

para consolarme

he roído los años

por ver

si algo

queda

más, siquiera eso



 

Quiéreme querido recuerdo.


El pasar

del tiempo

en esta 

tarde

de canciones

y recuerdos

en este año

y años 

que se fueron

quiera yo

pensar

en el 

otro

estado

de 

mi niñez

donde

sólo

había 

felicidad

en aquellos

campos

atestados

de flores

de huertos

labrados

de manos

que acariciaban

amor, amar

quiéreme 

querido

recuerdo

no dejes

que me vaya

sin que estés

a mi lado

 

martes, 15 de marzo de 2022

Me siento igual que un mar pacífico.


Me siento

igual

que 

un mar

pacífico


..........................


Ese mismo

instante

en que

se cruzó

el tiempo

fue

algo

nada placentero

................


Soy la hoja

que abandona

y se libera

en otoño

de sus brazos



 

El señor ciruela.

 


De modo que cuando salía a la calle llevaba un sombrero de copa, paraguas, un bastón, unos guantes, y una pipa. Una canción de cuna y chocolate.

El señor ciruela era muy viejo, mucho, mucho. Llevaba en este mundo un siglo.

Era muy atento. Saludaba a todo el mundo, inclinando un poco la cabeza.

Caminaba de un modo particular: saltitos aquí y allá. Le gustaba la vida por eso lo hacía.

También le gustaba la manzana caramelizada, onzas de chocolate, tanto que llevaba los bolsillos repletos.

Las papa bravas era lo que más le gustaba. En el bar de Armiñando siempre había.

Un día se fue de este mundo, se fue muy feliz y sonriendo.

Agradecido con todo.

Pero con los bolsillos llenos de onzas de chocolate.




viernes, 11 de marzo de 2022

La mala educación.

 


Hay personas que utilizan un tono enfático cada vez que dicen esto o aquello (con seguridad!), lo malo de todo esto es que equivocan la expresión, que como ya saben no es una crítica, ni tampoco se trata de juzgar, ni de denigrar, ni de acosar, por favor! Qué atrocidad! O, qué soberbia envenenada. Y es que es de inteligentes el saber estar, es de inteligentes por ejemplo en una empresa saber llevar a sus trabajadores, hace equipo, ¿verdad?. Hay que tener audacia, equidad, y no menospreciar a ninguna persona por su manera de trabajar, o de alcanzar las metas que se hayan marcado, no pisotear su autoestima, y muchos menos agravar la situación de tal manera que ese “equipo” nunca forme una piña, porque en realidad es inviable, porque la mala educación es en mi opinión el gran anticristo de la sociedad. Dejemos ahora a don diablo por un rato que no es el caso.

Hay personas que por el mero hecho de lograr cargos de alto nivel, ya sea en lo público, como en lo privado, ya sea el médico jefe del área de tal o cual, o el presidente de un gran gobierno. Aummmm ya sea un directivo, que calza un cuarenta y cinco, y que un día le regalan un despacho para su contento, por haber sido destituido de su anterior puesto, que casi siempre se consigue con muchísimos halagos, y burdas verborreas, pues resulta que ahora tiene un despachito y tiene a su cargo un pequeño grupo de trabajadores. Y cómo se le ensancha el alma!! cómo disfruta mirando por el ventanal a la calle transitada de pasos aquí y allá,y cómo se alegra que los rayos del sol entren por ella y acaricien su rostro.. oh¡ qué magnificencia, piensa, mientras se acomoda en sus aposentos, pero no donde moraban Pedro y Jacobo, no es su aposento, donde un cómodo sillón espera su trasero, que, más bien es bastante amplio, por cierto.



Pero he aquí, que igual que las moscas a la miel los pobres trabajadores, algunos, con poca dignidad y aprecio por la vida y por la cosas y por la causa deciden vestirse de gala y tocar con sus nudillos artríticos la puerta del mencionado caballero para darle la bienvenida claro está!.. pero en su afán de seguir siendo protegidos y a sabiendas de que, por su actitud y contemplación y modo de ver las cosas no se percatan en absoluto de que hay otro grupo restante de compañeros salgan perjudicados, no por no vestirse de gala para recibimiento, no, no, es porque inmediatamente pasan a formar el segundo lugar del “equipo” que lo pongo entrecomillado , pues resulta que cuando digo eso de pasar a un segundo plano no es por el protagonismo, no no no, ojalá y fuese solo eso; saben lo que es señores y señoras? : es el peso, que no el paso, de más trabajo o trabajo mal repartido, eso justo es! El trabajo mal repartido!. ¿Y cómo se forma equipo así?, pues nunca, nunca, jamás. Porque las personas tienen dignidad o eso es lo que deberían de tener en todo el sentido de la palabra, si,, dignidad. Pero ay señor, resulta que la vanidad no se lleva muy bien con la dignidad, y con la adulación, menos. “Yo quiero un puesto con más nivel y el nuevo jefe me lo dará. Yo quiero comprarme ese coche tan bonito y grande y si le llevo hasta el café al gran jefe, seguro que tendré recompensa. Yo quiero comprarme esos zapatos tan caros, ya veré como le entro al jefe. “

Pero sucede que, esas personas que tienen dignidad y que le sale hasta por las orejas y que también llevan largo tiempo haciendo informes, gestionando esto y aquello, porque en su día prometieron lealtad a la “causa” un día van y se cansan, si, si así de llano, se cansan, mucho, se cansan de hacer girar la rueca, de hacer girar el molino, y ya les importa muy poco si el pozo se llena de agua en diez minutos que en quince. Pero ahí no queda la cosa : resulta que el gran jefe decide una mañana soleada de primavera darle más trabajo al pobre ciudadano leal, que lleva huellas de todos lo años benditos de trabajo por todo su cuerpito y eso duele eh!

Duele mucho para que ahora venga un marimandón de pacotilla a decirle cómo tiene que agarrar las riendas de su humilde puesto de trabajo, que con tanta ilusión y afán ha defendido, ay ay,!

De ninguna manera va a consentir eso, porque a esa persona sacrificadita por su empresa le importa bien poco si puede o no comprarse un nuevo automóvil, o le importa bien poco si no usa corbata o no tiene presupuesto para tener una diferente cada día de la bendita semana. Esa persona lo que quiere es que le dejen en paz en su acogedora sillita, que tanto le ha partido la espalda y su preciosa mesita y demás enseres, lo que realmente quiere es pasar casi desapercibido, si, si invisible, casi.

Y de repente, zas! El susodicho le lanza que tiene que trabajar en algunas otras cosas, que además no son de su competencia, y qué creen ustedes que pasó? . Pasó que se enfadó mucho la amorfa persona mal educada que ejerce de gran jefe, se enfadó mucho y como no tiene idea alguna de dirigir un equipo como tiene que ser, como no tiene idea de equidad y de lo justo, y como no sabe siquiera hablar con cierta agudeza y énfasis, de modo que cada cual sepa el trabajo que ha de hacer, según su nivel en todos los aspectos, pues el caballero en cuestión se limita a castigar al señor que lleva tantos años sacrificado para obtener una justa pensión, bueno, digamos que justa, pero eso ya es otro tema pues como les iba diciendo, el gran jefe se enfada mucho y qué hace? Pues que deja de hablarle, le deniega sus días personales, y un largo etc.. aumm me suena a acoso.. bueno.. dejémoslo ahí.

De modo, que se ha convertido el hecho en una batalla, caramba! Qué raro! Una batalla!…

Veremos quien gana, el tiempo lo dirá, seguro. Porque el que se merece un buen cachetón lo tendrá, y bien dado, un cachetón mudo que es el que más duele,,, si si.. ese. el silencioso, el que pasa sin ser advertido por casi nadie, siquiera por el propio castigador que notará un ligero aumento de sus transaminasas y un empobrecimiento de su orgullo, de su vanidad y de su ignorancia.


Y aquí acabo, no sin decir, que la vida no es eso que suena, no es eso que se compra, no es eso que hace que la gente se babee ante un superior, no es eso que la gente piensa que es un templo de vicios o de lujos, no! La vida es esa caricia en tu rostro y es ese beso entre tus manos.. la vida es eso, la vida : la puñetera y preciosa y diminuta musiquilla que te acompaña siempre, cada amanecer…

¿Una respuesta?.

 

¿Una respuesta?

no 

el silencio

.........................


La leche

se ha secado

en los pechos

los ángeles

se han dormido

........................


No tengas miedo

sólo está lloviendo

mira qué bonito se 

ve el cielo



jueves, 10 de marzo de 2022

Le hubiera importado bien poco que la cena se hubiera enfriado.

 

A esas alturas Crispín habría renunciado a tener que cargar con la mochila que durante muchos años había llevado, y con mucha responsabilidad sobre sus hombros ahora maltrechos. Y es que no es fácil acometer con tantos asuntos diría yo, y en su conjunto, miles de variopintos y borrascosos asuntos que desde niño le impusieron nada mas nacer.

Salvo la maestra del pueblo con la que supo que en el mundo existían miles de bibliotecas, con miles de libros en sus estanterías, libros, con los que pudo ver otros mundos y otros planetas girando en el universo. También supo que debajo de la tierra se anclaban miles de raíces y que gracias a ello surgían por entre los surcos los árboles con los brazos extendidos al cielo, y miles de fértiles llanuras de trigo y muchas más cosas.

Llegó el día ansiado en el que Crispín se despojaría de ese bloque de cemento que cargaba desde su nacimiento, de modo que, una vez liberado de tanta responsabilidad sintió tal alivio que gritó de alegría, si, eso hizo el buen hombre, se desgañitó de tanto gritar y dijo al mundo: ¡Me importa bien poco que la cena se haya enfriado!.



Te he besado esos labios


Te he besado

esos

labios

de azúcar

¿y la verdad?


...................................


Hay certidumbre

de un cielo

que llora

.............................



Mis dedos

dibujan

su rostro

en la arena

negra

............................

 

miércoles, 9 de marzo de 2022

Preciosa.

 


Las ratas se paseaban por las aceras y las esquinas de cualquier callejón. El piso donde vive Preciosa está en lo alto de una de esos callejones. La limpieza es escasa.

Sus padres apenas la han criado. Además de trabajar jornadas enteras son drogadictos.

Una noche pudo ver cómo dos mendigos asaban a esas criaturas para comérselas; vomitó.

A veces no podía dormir por lo que cuando lo hacía tenía grandes pesadillas que la hacían despertar aterrorizada: un monstruo recorría su cama y señalaba con su dedo peludo que no chistase, que estuviera quieta. Obedecía. Así muchas noches.

Es claro que también se escuchaba una música agradable. Un local pequeño permanecía abierto hasta altas horas de la madrugada.

Pero el último sueño fue el peor de todos: como siempre se quedaba quieta y sin mediar palabra alguna. Esta vez sintió dolor, mucho dolor. Cuando despertó sangraba.

Entonces supo que no eran pesadillas.


El último sueño fue la última vez que permitiría eso. Disparó muchas veces al monstruo.

Preciosa es tan preciosa...


Y esas castañuelas mi arma



Y esas castañuelas

mi arma

suenan bonito!

Y esos ojos mi niña

brillan

Y esa estela

en el cielo

mi niña

que bonita

eres

baile español

cuerpecito

lindo



 

martes, 8 de marzo de 2022

El compás de las horas.




La lilas las dejas ahí, al lado de la pilastra; pero creo que aún no huele en la cocina, pensó al mismo tiempo. (Debe ser porque el mercado no ha abierto hoy o debe ser, que aún no es la hora, o que mi reloj anda adelantado).
Un cíclope tocaba en la puerta y la casa cimbreaba, todos los cuadros cayeron, y la lámpara cayó de inmediato: Cuando tocó el piso, se quebró. Había que abrir de inmediato, habría que hacerlo, de otro modo solo quedarían las ruinas. “Resoplando, trastabillando, entregó las cartas…)
El apio, el pimiento, todo cortado en finas capas, el caldo, las demás verduras estaban dispuestas, ahora si tocaba. Ahora el olor de la cocina saldría por la ventana, hacia la calle estrecha.
Ahora estaría ahí, justo en el banco del patio, sentada, descalza, con la cabeza gacha, leyendo. Se oye fuera cuando la lluvia arrecia. Como si en verdad fueran lanzados dardos del cielo, con la finalidad de clavarse, igual que las garras de un aguilucho. ¡Ah, la lluvia! Pensó eso mientras humedecía su dedo para pasar página, porque a ella no le hubiera importado que uno de esos dardos se hubiera clavado en su pecho, o en el muslo, o en los labios… se hubiera deleitado por ello.
La tormenta, luego la calma, la calma, luego la tormenta, todo eso se repetía en su cabeza, ¡glorioso día! Dijo.
!Hallelujah¡ La iglesia estaba cerca. Las voces al unísono, golpes en el pecho.


Yo mujer nací libre


Yo

mujer

nací

libre

soy

ave

luz

cielo

pero

también

 infierno


 

Pasear entre las páginas de un libro.

 


Pasear entre las páginas de un libro, un libro de cuentos: caminos aquí y allá.

Entre caramelos de café se había envuelto, como cuando una mano hubiera acariciado.

Ahora una hermosa higuera, ahora un tornado de estorninos. Una nube gandula sonríe.

A la izquierda juegan unos niños, cada uno con su cometa, la brisa es propicia.

Un ejército de hormigas desfila en el borde filoso, quizás algún trozo de pan de la merienda, quizás, entre líneas, e imágenes fosforescentes. ¡Qué revuelo!

Chocolates, duraznos, fresas en aquella otra esquina ¡Qué bonito! .

Aquí es donde se pliega el papel : un castillo azul, un puente, malvaviscos,¡ esponjita!

Arboledas. Un río pequeño que fluye, con sus peces y todo,¡ si hasta parecen de verdad!

Huele a cotufas. Un mastín ríe a carcajadas. Un búho duerme. Aquella carpa habla mientras recorre las aguas, algo sabrá, algo querrá decir.

Hay dos percheros. Son de la ropa de la bruja, es muy ordenada. La escoba, justo allí, en la parte derecha de una página, la siguiente página. ¿Cencerros?, si, lo llevan aquellos corderos, pero el perro guardián les ha desprovisto de ellos, porque los corderos deben ser libres, muy libres.

¿Falta una página? Si pero mañana, ahora sale la luna. Hay una luna grande.

Una guitarra suena. Gary Moore.

Aquí en la charca croan las ranas. Hay un plantón de tuneras alrededor.


¿Pero falta una página verdad?


Si.



lunes, 7 de marzo de 2022

Y llegó un día en que todo se fue


 Y llegó

un día

en que

todo

se fue

porque

nunca fue

del mismo

modo

volví

a mi lugar

del que nunca

tuve que salir

hasta siempre

siempre

Jamás

jamás.


domingo, 6 de marzo de 2022

Retales y otras inquietudes.

  Retales y otras inquietudes.


Más, hallé por azar aquella estela


de letras abotonadas de relatos e inquietudes,


que los tinteros parecen tener vida..,


Diría pues más que eso,


diría que llevan siglos pastando letras,


versos trotando,


anclados en las hojas, en las paredes de cualquier muro


de graffiti escritas palabras y resonando por costumbre,


y aquel que se deje llevar a tragos como el buen vino,


apuesta los duros con tal de dejarse llevar,


apuesta hasta los sueños por querer parar un rato,


a contemplar un tintero y una pluma,


de inquietudes pespuntes en los folios…


Como una mosca se muere en la miel,


se quedó una naufraga tallada de antaño.


Más no era sirena, no era Afrodita,


Era más bien un pasajero tiempo,


venido de otra época por si en algún instante,


fuese advertida por sus ojos al mirar,


por una palabra, quizás un verso perdido.


Más dijo: os juro si aún se escriban versos,


en esa otra vida hallaré el mismo camino


anclado al tiempo olvido,


por reencontrar


y yacer entre mariposas ,


en la esbeltez del trigo...


PD. Gus.


Lo dejo otra vez. Es un poema o como quiera que sea. (Muy especial para mí).

María Gladys Estèvez.

Ballade pour Sophie

Ballade pour Sophie

Se habían despedido el mismo día en que se encontraron, solo que, ninguno de ellos lo sabría hasta pasado unos años, en que, l...